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El Doble Misterio de Cristo  

 

Cuando usted viene a Cristo, usted descubre que el misterio es doble. De entrada, es Él en Sí, como dijimos; Dios personalmente en Cristo, de modo que Cristo es Dios encarnado. Pero, entonces, usted descubre por lo que fue revelado, para y a través de Pablo, que Cristo toma un Cuerpo; pero no un cuerpo físico, sino un cuerpo espiritual “la iglesia que es su cuerpo”. Ef. 1:22-23; y la Iglesia siendo su Cuerpo nuevamente se hace el misterio de Cristo; es decir, aquí está Dios en Cristo viviendo en una compañía de personas, los elegidos, el Cuerpo de Cristo; y la carta a los Efesios particularmente toma en este aspecto de Cristo que usted tiene aquí un cuerpo de personas llamado de Iglesia, en el cual Dios habita.

Hay un misterio sobre este pueblo, sobre esta particular Iglesia, hay algo aquí que es sobrenatural, algo que es espiritual. No es sólo una sociedad de personas llamadas cristianas, un número de personas que se reúnen en la fe cristiana y creen en ciertas doctrinas. Hay algo más que eso sobre esas personas. Si usted sólo supiera y comprendiera esto, en la realidad más profunda e interior del ser de esas personas; ellas no son meramente personas naturales. Hay algo escondido dentro de ellas que no puede ser explicado en ninguna área, y usted tiene que decir, 'Es Dios, es el Señor’. Cuando usted encuentra esas personas, cuando ellas se reúnen incluso en poco número, si usted entra allá, usted descubre algo de más en esas personas, algo más que ellas son; usted encuentra al Señor. Hay un misterio acerca de eso, y el misterio de Cristo de lo cual Pablo está hablando aquí no es sólo el misterio de Cristo, pero es el misterio del Cristo Corporificado, de Cristo en Su Cuerpo, la Iglesia.

* Hay muchas personas que conocen toda la verdad del misterio de Cristo y de la Iglesia, toda verdad del Cuerpo de Cristo, sin embargo son personas muy pequeñas. Muchas de ellas conocen la verdad y aún están viviendo en la condición de los Corintios, donde todo es muy terrenal y centrado en lo ‘yo’; y muchas otras están viviendo como los gálatas, donde todo es muy legalista. Para que esa verdad signifique un crecimiento espiritual, ella tiene que estar en el campo de los Efesios.

¿Cuál es la situación de los Efesios? Es esta: Pablo dice que había sido revelado a él el misterio. Y ahora él habla que ora por esas personas. Ellas son cristianas, no hay cualquier duda sobre eso, sin embargo él dice que ora por ellas, "Para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de Él, habiendo iluminados los ojos de vuestra comprensión, para que sepáis cual sea la esperanza de su vocación, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos; y cual la supereminente grandeza de su poder sobre nosotros, los que creemos, según la operación de la fuerza de su poder, que manifestó en Cristo, resucitándolo de entre los muertos, y poniéndolo a su diestra en los cielos." (Ef. 1:17-20).

Todo eso tiene que ver con la verdad, con la eterna vocación y el destino de este Cristo Corporificado. El conocimiento De él no es el conocimiento de Cristo como una persona separada. Es el conocimiento de Cristo ahora, en todo lo que Él representa de un modo corporificado. Este es el conocimiento que él ora para que ellos adquieran; y, habiendo orado de esta manera por los efesios, Pablo se vuelve hacia la cuestión del crecimiento espiritual. Él llega finalmente al gran punto en el cuarto capítulo _ “hasta que lleguemos... a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo”. Como usted llega a esta plenitud? ¿Qué es el crecimiento espiritual? Es el resultado de la iluminación de los ojos de su corazón, en relación a la real medida y significado de Cristo, siendo expresado en su Cuerpo, la Iglesia. El punto es que usted vea, que esto sea revelado a usted. Entonces inmediatamente usted saldrá de la posición de los Corintios y de los Gálatas, de la iglesia meramente terrenal, con sus ordenanzas, ceremonias, etc. Usted está en una posición celestial, y, entonces, irá a crecer.

 

La conexión del bautismo: "Romanos”, “Corintios” y "Gálatas" 

 

En Romanos 6 el bautismo resulta en un caminar en una nueva vida. “Fuimos sepultados... con Él por el bautismo en la muerte: para que, así como Cristo resucitó de entre los muertos, por la gloria del Padre, así andemos nosotros también en novedad de vida”. Es decir; a través del significado espiritual del bautismo usted simplemente anda en una nueva vida, usted tiene una nueva vida.

En Corintios, usted descubre que la unión con Cristo crucificado significa que la mezcla de la vida vieja con la vida nueva tiene que ser tratada; usted posee una nueva vida, sin embargo, usted no debe mezclar en ella la vida vieja.

Así “Corintios” enseña que usted debe vivir totalmente y solamente en la vida nueva, y en el traer la vida vieja juntamente con la nueva. Vea II Corintios 5.

Cuando usted va a “Gálatas”, Pablo dice, “Porque todos cuántos fuisteis bautizados en Cristo ya os revestisteis de Cristo." (3:27). En “Gálatas”, el bautismo es vestirse completamente del nuevo hombre; “Donde no hay ni judío ni griego, ni esclavo ni libre, ni hombre ni mujer; pues todos somos uno en Cristo Jesús”. Usted se viste del nuevo hombre. Las divisiones de los corintios se acaban; el bautismo, en relación a la posición de los gálatas significa que nosotros no conocemos nadie según la carne. Pero, aún en “Romanos”, “Corintios” y Gálatas, es como si estuviéramos viviendo cómo cristianos en una nueva vida delante del Señor aquí, sobre la tierra.

* Usted va a “Efesios” y lee "Dios... Estando nosotros aún muertos en nuestras delitos, nos vivificó juntamente con Cristo (por gracia sois salvos),... Y nos resucitó juntamente con él y nos hizo sentar en los lugares celestiales, en Cristo Jesús;" (2:4-6).

En “Efesios”, el bautismo ve la Iglesia localizada en los cielos, a través de la muerte y de la divina vivificación y resurrección, juntamente con Cristo. Es algo mucho más completo que sólo una vida cristiana individual.

Usted puede ser bautizado como un individuo, sin embargo debe reconocer que Dios nunca piensa en usted como un individuo, en ese sentido; Él nunca se refiere a usted como una persona aislada. Él le mira a partir del punto de vista del Cuerpo como un todo, y dice: “Cuando usted fue bautizado, no fue bautizado sólo como un individuo; usted fue bautizado como parte de la Iglesia, y en su resurrección, usted es visto del cielo en su relación con La Iglesia”. Por eso la posición más elevada de Efesios es esta, que ahora, siendo vivificados y resucitados juntamente con Cristo, y sentados en los lugares celestiales, es una cuestión a los otros creyentes, y en esa relación, usted encontrará su plenitud. Usted jamás hallará crecimiento espiritual sólo como un individuo separado, aislado, pero si en relación con los otros creyentes. "Dios hace que el solitario viva en familia”. (Sal. 68:6), y no hay cualquier duda sobre esto, independientemente de usted entender o no, de aceptar o no esta doctrina, usted puede probar rápidamente en experiencia que nuestro crecimiento espiritual realmente viene por medio de una relación espiritual y celestial verdadera con los demás creyentes.

* Esto parece algo terrible de decir, pero usted tiene una porción de otros factores con los cuales tendrá que lidiar. Si usted fuera una persona común en este mundo, podría salirse muy bien, sin embargo, siendo cristiano, usted tiene que enfrentar toda fuerza de Satanás trabajando sobre cualquier pedacito de vida natural que él pueda encontrar. Así, él genera dificultad entre los cristianos, los cuales ellos no tendrían si no estuvieran en una posición celestial. Ellos están encontrando fuerzas en los lugares celestiales. Hay el roce y la fricción, y todas las corrientes de la cruz que intentan dividir a los cristianos, pero que no intentan dividir las otras personas, porque hay tanta cosa envuelta en esa unidad espiritual verdadera entre el pueblo del Señor por el Señor y contra Satanás. Satanás quebraría esta unidad espiritual si él pudiera. Él sabe lo que esa unidad representa para él, y el Señor sabe lo que ella representa para Sí mismo y de las dificultades de los cristianos que viven juntos.

Ahora, ¿cuál es la conclusión? Cuando esas dificultades aparecen, debemos decir: ‘Es evidentemente necesario para yo alcanzar una nueva posición espiritual, llegar al tope de esto. Si yo no desisto y alargo la mano, debo llegar a un crecimiento espiritual; tengo que conocer al Señor en una forma nueva, a fin de obtener más gracia, amor, paciencia’. Es decir crecimiento espiritual, y esto viene a través de relación. (Naturalmente, esta es sólo una forma; existen muchas otras por las cuáles el aumento espiritual viene por medio de la relación) Si nosotros tan solamente nos mantenemos juntos en oración, hay aumento espiritual.

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